“EL CAMPO” y los “OTROS CAMPOS” en Argentina. ¿Qué quieren y para qué?

Lo agrario y lo rural es mucho más que la producción y exportación de algunos granos, como nos quieren hacer creer los grandes medios de comunicación y sus anunciantes; tiene que ver con la tierra, el agua y el trabajo, con nuestros alimentos y salud, con nuestra vida presente y futura. Por eso consideramos una obligación de la Universidad Pública contribuir a una mejor comprensión de lo que sucede en el agro, sus consecuencias, sus causas y los temas a enfrentar.

Devaluación y ajuste

Cualquiera sea la forma en que se la llame lo que se ha producido en la Argentina es una fuerte devaluación del peso (no las minidevaluaciones que veníamos teniendo) y este enfoque extremo ya ha sido vivido muchas veces por la mayoría de los argentinos y figura entre sus recuerdos menos felices. La teoría ortodoxa señala que las devaluaciones, cuando hay problemas en las cuentas externas conducen a reducirlos y a expandir la actividad económica. Para los partidarios de los efectos expansivos de una devaluación, esto resulta no sólo por una mejora en la balanza comercial sino también por un impulso a la producción interior al abaratar los bienes producidos locamente permitiendo sustituir importaciones. Pero este no ha sido el caso de la Argentina, como lo hemos demostrado muchas veces y como lo expone con claridad una tesis de licenciatura presentada en la FCE de la UBA por Pablo Wahren.

El plan económico del macrismo

El principal objetivo del plan presentado por el ministro de hacienda y finanzas, Alfonso Prat Gay, es generar un marco de negocios para el gran capital que opera en el país, tanto nacional como extranjero. Ese negocio debe ser sustentable en el tiempo, esto es, reproducirse permanentemente, y para ello debe realizarse en un marco interno favorable, por lo que la oposición al plan debe ser neutralizada, si es posible con el menor grado de conflicto, para lo cual se plantea la captación, no otro es el fin de la invitación a los candidatos presidenciales, a los gobernadores, y dejarle la administración de las obras sociales a la CGT Balcarce (Caló de la UOM, Andrés Rodríguez de UPCN, Gerardo Martínez de Uocra, Pignanelli de Smata, Cavalieri por Comercio, Lingieri de Obras Sanitarias, entre otros) con la designación de Luis Scervino como presidente de la Superintendencia de Servicios de Salud, entre las primeras medidas políticas adoptadas por el nuevo gobierno.

"No hay un Ministerio de Energía sino una Cámara empresaria con poder ministerial"

Según publicó esta semana el Observatorio de la Energía, la Tecnología y la Infraestructura para el Desarrollo (OETEC), el flamante Ministerio de Energía y Minería está integrado por ex directivos clave de la industria privada petrolera y energética nacional y multinacional.

Federico Bernal, director general del OETEC, señaló que "Los intereses de los consumidores se verán profundamente lesionados como consecuencia de tener un Ministerio de Energía que más que ministerio es una Cámara de empresas con poder ministerial".

Entre los casos destacados, OETEC lista los siguientes:

- Shell al frente de la máxima dirección ejecutiva del ministerio. Su ficha es Juan José Aranguren.

Hacia una nueva relación Nación - Provincias

El largo proceso de la organización nacional supuso encontrar una manera de resolver la cuestión del financiamiento del estado nacional. La remoción de las aduanas interiores fue una de las últimas restricciones que se levantaron para culminarlo. Las cuestiones en torno a la Aduana del Puerto se pacificaban y sus potencialidades servían a la unificación nacional. No casualmente, a la hora de definir las fuentes del financiamiento, en el art. 4 de la Constitución Nacional (CNA), el constituyente señala en primer término que los recursos provenientes del comercio exterior contribuyen al sostén del Estado Nacional. Recién en cuarto término aparecen los recursos provenientes del uso de la capacidad de imposición del Estado sobre el mercado interno. Así, dejó en manos del Tesoro de la Nación los recursos provenientes de los derechos de importación y exportación, de la venta o locación de tierras de propiedad nacional, de la renta de Correos, de las demás contribuciones que equitativa y proporcionalmente a la población imponga el Congreso General, y de los empréstitos y operaciones de crédito […] (art. 4 CNA).

Constitución, legalidad y legitimidad en tiempos de traspaso del poder

Asistimos actualmente a un duro debate en el que confrontan las dos corrientes que desde antiguo luchan por predominar en la historia del hombre: quienes desde grandes conglomerados económicofinancieros y periodísticos, con sus intelectuales orgánicos inculcan una visión falsa de la historia y de la realidad contemporánea impulsando un clima ideológico proclive al sostén de fuerzas políticas conservadoras, y por otro lado quienes impulsan el progreso social. Dos modelos en pugna. Confrontación que existe en distintas zonas del planeta, como en nuestro caso en el contexto regional y en Argentina. En esencia es la disputa sobre la distribución del ingreso, del producto social; o sea, quienes serán los destinatarios del resultado de políticas socio-económicas que se lleven adelante.

Parir la economía kirchnerista

El jueves 15 de diciembre de 2005, Néstor Kirchner anunció en el Salón Blanco de la Casa Rosada que Argentina cancelaría con reservas de libre disponibilidad del Banco Central la deuda con el FMI por un total de 9510 millones de dólares, desembolso que se efectivizó el 3 de enero de 2006.

Ese inmenso esfuerzo de la sociedad de destinar esos miles de millones de dólares sirvió para retirar de la escena local al auditor de los intereses de los acreedores, cuya única receta es el ajuste ortodoxo. Kirchner había afirmado que la cancelación de la deuda con el Fondo Monetario permitiría “ganar grados de libertad para la decisión nacional” puesto que a partir de esa medida “el país será otro: tendrá soberanía política e independencia económica”.

Historias de asunciones

Hubo de todo y para todos los gustos en la historia de las asunciones presidenciales. Desde aquella anodina ceremonia sin pueblo en la que Rivadavia se convertía en nuestro primer presidente allá por 1826, hasta las multitudinarias del siglo XX. Recordemos que el sistema presidencial en nuestro país tuvo en sus orígenes una muy corta vida. Tras el fracaso estrepitoso de Rivadavia y del Congreso que venía sesionando en Buenos Aires desde 1824, el país se encamina en 1827 al régimen de las autonomías provinciales en el que cada provincia asume su soberanía delegando en el gobernador de Buenos Aires las relaciones exteriores de aquella difusa Nación.

Primeras señales de un gobierno neoliberal

Las recientes elecciones demostraron un fortalecimiento del sentir democrático de todo el pueblo argentino. Más allá de los apasionamientos propios de toda campaña electoral, cabe destacar la normalidad con que se han desarrollado los comicios y la transparencia garantizada por el Estado.

El resultado nos indica que la sociedad argentina está hoy representada por mitades. Aunque el escaso margen del ganador no es un dato adicional, lo cierto es que hay una nueva fuerza política de signo marcadamente contrapuesto al modelo actual, que iniciará una nueva etapa en la vida política nacional.