Oportunidades de desarrollo en un sector estratégico: la industria farmoquímica

Evelin Goldstein, Jesica Monzón, Nicolás Barcos


La industria farmoquímica tiene múltiples características que permiten considerarla un sector estratégico pero, lejos de estar ajeno a las lógicas globales de producción, se ve condicionado por las capacidades de firmas chinas e indias. Sin embargo, mediante una mejora considerable que eleve las capacidades productivas de las empresas locales se podría dar una mejora de la competitividad del sector con consecuente impacto en la balanza comercial y generación de empleo.

La industria farmoquímica es la responsable de producir ingredientes farmacéuticos activos (IFA) que es el insumo clave para el sector farmacéutico. El IFA es la sustancia responsable de la función principal para la cual fue diseñado un medicamento. 

Esta industria tiene múltiples características que permiten considerarla un sector estratégico. En primera instancia, las empresas que producen IFA son, generalmente, firmas que generan valor agregado, emplean personal calificado y tienen capacidad para innovar. En segundo lugar, estas firmas exportan buena parte de lo que producen, por lo tanto, podrían contribuir a generar divisas. Y, por último, se trata de una industria que provee insumos para la producción de medicamentos para la salud humana, otro punto que lo ubica en el abanico de sectores clave para la estructura productiva argentina.

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La industria farmoquímica nacional: ¿qué hacen las empresas para competir en el mercado mundial? 

El sector farmoquímico nacional se caracteriza por ser, simultáneamente, muy pequeño pero también muy dinámico. Son muy pocas las empresas que producen IFA en la Argentina y la mayoría se agrupan en la Cámara Argentina de Productores de Farmoquímicos (CAPDROFAR). Para tener una dimensión de la envergadura del sector, cabe mencionar que solo son nueve las empresas asociadas a dicha cámara, las cuales producen 110 IFA y explican más del 90% de la fabricación de IFA en Argentina. Aproximadamente, emplean 1.650 personas, existiendo un alto grado de calificación requerido en las empresas del sector. Dichas empresas realizan inversiones en investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) y en bienes de uso por un monto promedio anual de USD 22 millones (promedio del último quinquenio). 

Si bien se trata de una industria dinámica y muchas empresas del sector exportan buena parte de lo que producen, este sector presenta un déficit comercial sostenido desde 2012. La razón de ello es que el grueso de los insumos que utilizan las farmacéuticas para la producción de medicamentos en el país son importados. Si hablamos propiamente de IFA, las firmas solamente adquieren localmente entre un 12% y un 14%. En concreto, las firmas locales que fabrican IFA no pueden competir con los precios de las firmas de China o India, especialmente por diferencias en la escala de producción. 

En este contexto, las empresas que producen IFA en Argentina, han venido implementando diferentes estrategias para “saltear” las dificultades de competitividad:

  1. Inserción externa por calidad. Aprovechan las altas exigencias de ciertos mercados (Europa, Australia, Estados Unidos, Japón) que priorizan la calidad frente al precio. Algunas de las empresas argentinas pueden cumplir los estándares mientras que no siempre las firmas chinas e indias pueden hacerlo.
  2. Inserción (externa e interna) basada en la producción de genéricos. Algunas empresas se focalizan en rutas alternativas a las patentadas o en procesos que no están patentados en Argentina (nichos), con foco en IFA con patentes vigentes en China o India, eludiendo su competencia. 
  3. Autoabastecimiento intra-grupo. Hay empresas que producen medicamentos y, además, IFA. En algunos casos, optan por producir sus propios IFA por una decisión estratégica del grupo. La razón puede ser para acortar el camino y llegar al mercado tempranamente con el primer o segundo genérico de medicamentos. También ocurre que algunas quieren asegurarse la disponibilidad, la calidad y homogeneidad de los IFA a lo largo del tiempo (especialmente cuando se trata de IFA difíciles de conseguir).
  4. Producción a façon. Otra estrategia llevada a cabo por algunas empresas es producir IFA exclusivamente para terceros, tanto locales como del exterior.

¿Cuáles son las limitaciones para el desarrollo del sector?

Además de los impedimentos mencionados para competir a escala global, al analizar las limitaciones específicas del sector, es posible encontrar algunos desafíos a superar, a fin de transformar las potencialidades en un aumento sostenido de la producción y de las exportaciones: 

  • Asimetrías regulatorias: en teoría los estándares de calidad exigidos por la Guía de Buenas Prácticas de Fabricación (BPF) deberían aplicarse de igual forma para productos nacionales e internacionales, sin embargo, en la práctica se observan asimetrías ya que la ANMAT no audita por sí misma a los productores extranjeros.
  • Estándares de calidad: muchas de las plantas farmoquímicas del país presentan atrasos tecnológicos, lo cual limita el tipo de procesos (reacciones químicas) que se pueden realizar en ellas. Además, algunas de estas plantas no son auditables por autoridades regulatorias de alta exigencia – como la FDA y la EMA-, lo cual reduce las posibilidades de exportar a Estados Unidos o Europa. 
  • Proveedores de la industria farmoquímica: casi la totalidad de los insumos proviene de países como China e India, debido a la falta de desarrollo de la industria química nacional. Sus precios, en algunos casos, llegan a ser similares a los del IFA terminado, lo que suele truncar los desarrollos de las empresas.

Lo dicho previamente impacta en la balanza comercial, que arroja un saldo de comercio exterior deficitario. Y, por tanto, invita a pensar hacia donde debe orientarse la industria. 

La búsqueda de oportunidades: la estrategia de nichos

A pesar de las dificultades u obstáculos que se registran para desarrollar el sector, también se identifican múltiples oportunidades para impulsar la producción y las exportaciones de IFA. Algunas de estas son:

  • Nuevos mercados: las empresas que se han especializado en la producción de determinados IFA pueden aprovechar para ganar nuevos clientes (principalmente en mercados donde hay preferencia por IFA que no sean producidos en China).
  • IFA “mejorados”: las empresas que están produciendo determinados IFA podrían diversificar su producción al incluir una variedad sobre el IFA que ya producen.
  • IFA de alta potencia: producir estos IFA que son aquellos que poseen actividad farmacológica en dosis muy pequeñas (generalmente, son de alto costo y se consumen en muy bajo volumen). Actualmente, la oferta en el mercado local es prácticamente inexistente y hay oportunidades para su producción. De todas formas, dado que estos activos deben elaborarse en plantas que cumplan con exigentes normas de producción, podrían requerirse de nuevas inversiones para implementar esta estrategia. 
  • IFA innovadores: existen nuevas plataformas de desarrollo y producción de IFA de alto costo y valor agregado, sin embargo, aquí también se requerirán inversiones. Por ejemplo, algunas drogas que están por venir están basadas en la tecnología de oligonucleótidos y muchas de estas no tienen patente en nuestro país. 

Apoyo a la producción y exportación de IFA: ¿qué se requiere para impulsar un verdadero salto?

Por las oportunidades que el sector ofrece en términos de divisas, es recomendable implementar medidas que impulsen un salto en las capacidades productivas y de exportación. A continuación, a partir de un estudio realizado en el marco del Consejo Para el Cambio Estructural del Ministerio de Desarrollo Productivo de Nación, que se puede leer en el siguiente link, se plantean algunos lineamientos generales sobre los cuales hacer foco para impulso del sector:

  1. Financiamiento: hay un conjunto de proyectos o iniciativas que tienen como finalidad aumentar la producción de IFA, mejorar su calidad, incorporar la producción de nuevos IFA y nuevas plataformas de desarrollo y producción, dar cumplimiento a aspectos regulatorios y acceder a nuevos mercados, entre otros objetivos. Estos proyectos podrían llevarse a cabo si se canalizara una asistencia financiera de unos USD 33,5 millones.
  2. Fomento al comercio exterior: la reducción de las alícuotas de derechos de exportación (previa evaluación) podría darles mayor competitividad a los productos y, de esta forma, podrían aumentar las exportaciones del sector.
  3. Desarrollo de proveedores de la industria farmoquímica: resulta recomendable indagar sobre la potencialidad de las empresas químicas nacionales para el desarrollo y la producción de insumos para las empresas farmoquímicas. 
  4. Aspectos regulatorios/sanitarios: la equiparación de las exigencias sobre IFA locales e importados (previo estudio sobre las posibles implicancias) favorecería la producción local. Otra iniciativa podría ser el otorgamiento de certificaciones BPF a pedido de los fabricantes locales de IFA. Esta certificación otorgaría una herramienta adicional para mejorar la competitividad de los IFA nacionales en mercados como el de la Unión Europea.

En conclusión, el sector farmoquímico tiene una gran importancia en términos económicos y de salud para el país. El mismo, lejos de estar ajeno a las lógicas globales de producción, se ve condicionado por las capacidades productivas de las firmas chinas e indias. Sin embargo, bajo estas pautas generales planteadas, se esperaría una mejora considerable que eleve las capacidades productivas de las empresas locales. Esto permitiría una mejora de la competitividad del sector, con su consecuente impacto en la balanza comercial y en la generación de empleo del mismo.

 

misionproductiva - 10 de octubre de 2022

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