La caída del imperio de los economistas

Mientras los economistas sueñan con poner a Dios en sus modelos, los ciberutopistas sueñan con revertir la caída del hombre creando humanos con características divinas. Esta es la apoteosis de una fantasía de Occidente, que todavía se ve a sí mismo como el portador de la civilización universal, y al resto del mundo como un indicador cultural retrasado. Para colmo, el triunfo teórico del universalismo se produce justo cuando el poder occidental se derrumba