“Cuando hablamos de rutas, hablamos de vidas, hablamos de futuro”
Hace unos días, la justicia le puso un freno al cierre de la Dirección de Vialidad Nacional que el gobierno nacional dispuso por decreto, haciendo lugar a una medida cautelar presentada por el Sindicato de Empleados de Vialidad Nacional (SEVINA).
La jueza Martina Isabel Forns, del Juzgado Federal en lo Civil y Comercial y Contencioso Administrativo de San Martín 2, resolvió hacer lugar parcialmente a la medida cautelar de no innovar solicitada y ordenó al Estado Nacional PEN abstenerse de ejecutar cualquier acto administrativo que derive del decreto 461/2025, “incluyendo reubicaciones, traslados, cesantías, suspensiones, pases a disponibilidad de personal o supresión de estructuras vinculadas a la Dirección Nacional de Vialidad”.
La misma resolución de otorgó a la medida una vigencia por el período de seis (6) meses.
Es importante destacar que entre los considerandos de la resolución la Jueza señala que “la Constitución Nacional como los convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) con jerarquía constitucional –en particular los Convenios N.º 87, 98 y 151- impiden al Estado, en su rol concurrente de empleador y regulador, alterar de manera unilateral condiciones de trabajo que han sido establecidas por norma colectiva con plena vigencia”.
Además, señala que “el art. 32 del Decreto 461/2025 al disponer una condición para reconocer la estabilidad del personal con una fecha de vencimiento, es decir, cuando se dice ´hasta tanto se adecúen la conformación y estructura organizativa correspondiente´,- se vulneran las normas y garantías laborales vigentes”.
Estos argumentos, son generales y pueden ser usados en todos los casos de disolución o de reestructuración de organismos del estado firmados por Milei.
El fallo fue muy bien recibido por las y los trabajadores de Vialidad Nacional. Rubén Sacchi, dirigente del Sindicato de Empleados de Vialidad Nacional (SEVINA), en una entrevista realizada por RTN, Radio y Televisión de Neuquén, dijo que “es un muy buen fallo, que busca que Vialidad siga con las funciones que le son propias y con su ya escaso personal. En este momento tenemos aproximadamente un trabajador cada 8 km”.
Es muy importante comprender además la verdadera dimensión de la tarea que Vialidad Nacional realiza a lo largo de todo el territorio nacional y cuál es el número de trabajadores y trabajadoras de ese organismo. Rubén Sacchi dijo en ese reportaje: “Supimos tener una dotación de 18.000 trabajadores en la década del 70 que fue destruida Vialidad en ese momento por la dictadura y ya perdimos 10.000 trabajadores cuando retorna la democracia. A partir de ahí, con distintos vaivenes nunca superamos el numero de 6.000 y en este momento estamos en 5.200, muy escaso para los 40.000 y pico de km que se deben atender en el país”.
Ya sabemos que el gobierno de Milei está dispuesto a vetar todo lo que las camáras legislativas dispongan sin su acuerdo, y a llegar a la justicia de ser necesario. Por eso se espera que frente a este fallo el gobierno nacional presente una apelación. Por eso Sacchi dijo: “si el gobierno veta a un aumento exiguo para los jubilados, qué podemos esperar que haga con un fallo que le da vuelta el brazo completamente en cuanto a su prensión de desguazar un organismo como vialidad nacional”
En todo este tiempo del gobierno de Milei, marcado por la fuerte desfinanciación de los organismos del estado, los y las trabajadores de Vialidad Nacional han venido desempeñando su tarea. Al respecto Sacchi dijo en la entrevista: “El trabajador vial tiene su voluntad del trabajo, pese a las circunstancias y trabaja con lo que tiene. En muchas oportunidades los gobiernos o las intendencias los proveen de algunos materiales con los que no cuentan y son básicos, como el material asfáltico”.
La importancia estratégica de mantener en condiciones adecuadas los caminos de nuestro país, al igual que todas las otras vías de comunicación, es innegable. No resulta racional desguazarlo. ¿Cuál pude ser entonces el objetivo del gobierno nacional para avanzar en ese sentido? A esta pregunta, Sacchi en esa entrevista de Radio y Televisión de Neuquén respondió: “es un tema de soberanía. La privatización mantendría las funciones de vialidad en manos privadas. En este caso lo que se está queriendo hacer es pasar los 9.000 y pico de Km que son rentables a concesiones privadas, en condiciones altamente desastrosas, porque ni siquiera se plantea el pago al estado de un canon, como en los 90 que también fueron desastrosas, pero al menos el estado recaudaba de esa millonada que levantaban los peajes, sin hacer nada de obra. Ahora ni siquiera eso”.
“El tema es qué va a pasar con el resto de los kilómetros. ¿Cómo van a privatizar algo que no quiere la privada?… Una empresa, obviamente tiene un ánimo de lucro…. Hay lugares donde por el exiguo tránsito, ni siquiera le alcanzaría con lo recaudado por peaje para abonar el salario del empleado que lo cobra”. “Esas rutas van a quedar en el abandono y por ende cuando hablamos de rutas hablamos de pueblos, hablamos de vidas, hablamos de familias, hablamos de futuro. Eso se va a sentir muchísimo más en las provincias que tienen grandes extensiones y que quedarían aisladas del resto del país. Esto viene a sumarse al proyecto que se tuvo con los trenes, y hace muy poco también con la Dirección Nacional de Vías Navegables, para dejar en manos del cuerpo de ingenieros de los Estados Unidos el patrullaje del río Paraná y con nuestra línea de bandera. No hay más que un plan de entrega de nuestra soberanía, que también se ve en otros gestos múltiples, que no solo tienen que ver con las vías de comunicación.”
Fuente: Huellas del Sur - Julio 2025