Introducción a las redes del delito global
El mundo vive una ola de fraudes empresarios; circulación y lavado de gigantescos flujos financieros provenientes de actividades delictivas; guerras con objetivos económicos; desarrollo de redes de delincuentes, bancos, empresas y políticos en escala global involucradas en negocios negros, blancos y de color indefinido; avances sobre el poder de los estados y colaboración de los propios estados con las asociaciones criminales. La difusión de la lógica del mercado y de una ética del enriquecimiento individual, el deterioro de la capacidad reguladora de los estados y la ayuda de los avances tecnológicos han confluido, en las últimas décadas, para crear el ambiente propicio para el desarrollo de las formas más perversas de funcionamiento del capitalismo. La mayoría de los delitos económicos nacionales o globales existen desde los orígenes mismos del capitalismo y, en algunos casos, de la sociedad misma. Pero quizá nunca como ahora han dejado de ser excrecencias o vicios periféricos del sistema para convertirse en piezas constitutivas y básicas del funcionamiento de lo que puede denominarse sin temor a la exageración, como el Capitalismo criminal.