Desde inicios de la década de los '90 en la Argentina se ha implementado un conjunto de políticas tendientes a la privatización de la economía y de los activos del estado. Esto incluyó la concesión de los servicios ferroviarios, cuyo proceso comenzó en 1981. Si bien este proceso de transformación tuvo una gran repercusión en su momento, es notable la escasez de información existente sobre la calidad del servicio y la prestación empresaria. La investigación sobre la que se basa este artículo fue sufragada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y llega a algunas conclusiones relevantes. Compara la situación ferroviaria en los años 1957, 1980 y 1998, y concluye que el sector ferroviario sufrió una caída grave, sobre todo en los años en que se aplicó la política neoliberal. La caída del número de estaciones de carga en el período 1980/98 fue del 45 por ciento. Por otra parte, la población sin servicio de trenes, que era del 10% en 1980, se duplicó en 1998.