STABAT MATER*
Estaban las madres de los estudiantes mexicanos, consternadas, por la matanza de sus hijos en manos de narcos liberados.
Estaban las madres norteamericanas, acongojadas, recibiendo a sus hijos en cajas de madera, muertos en una guerra petrolera.
Estaban las madres palestinas, desgarradas, por la muerte de sus hijos en un enfrentamiento sin fin.
Y estaban las madres israelíes, dolientes, por la misma causa.
Estaban las madres africanas sin consuelo, porque el mar Mediterráneo se convirtió en la tumba de sus hijos que iban en busca de vida.
Estaba la madre musulmana desolada, contemplando el cuerpo mutilado de su hijo, inmolado por la promesa perversa de un paraíso con huríes.
Estaban las madres del dolor y el gatillo fácil.
Estaban las madres del paco luchando sin cuartel, contra los traficantes y sus cómplices.
Estaba la madre del Guernica clamando al cielo con el hijo en su regazo, muerto por las bombas nazis.
Y estaban Dvorak, Haydn, Rossini, transmitiéndonos en María la pena sin medida de todas estas madres que estaban…
* Escrito redactado durante los ensayos de la obra de Dvorak diciembre de 2015.
* Coreuta Lagun Onak; integrante de la Comisión Directiva del IADE.