"Dos modelos en pugna"

El 22 de noviembre próximo, la ciudadanía argentina deberá optar entre dos modelos antagónicos de país. Por un lado, la CONTINUIDAD de un proyecto de inclusión proponiendo cambios y por otro un CAMBIO que supone fuertes modificaciones para la economía que se ha venido desarrollando durante estos últimos 12 años.

En medio de esta puja, compartimos el debate que nos ofrecieron el 5 de noviembre Alejandro Rofman y Aldo Ferrer organizado por el IADE y coordinado por Marisa Duarte.

Con el 15 como objetivo

Economistas de la alianza Cambiemos y un ex presidente del Banco Central coinciden en apuntar la devaluación ampliada que planea el macrismo. Éste será uno de los ejes centrales en el debate.

Durante la semana, el economista de la alianza Cambiemos Alfonso Prat Gay planteó la posibilidad de realizar una presentación judicial debido al “compromiso patrimonial” que la venta de dólar en el mercado futuro estaba implicando para el Banco Central. Instantes después, el titular de la entidad monetaria, Alejandro Vanoli, afirmó que llevaba adelante “una política cambiaria y monetaria con gran responsabilidad y con total apego a la normativa vigente”, al tiempo que afirmó que esta modalidad le había permitido al Banco Central registrar una ganancia de casi 5.500 millones de pesos en el último año.

El sueño de Rivadavia

Bernardino Rivadavia fue el administrador de la subordinación de las clases acomodadas post independencia (criadores de ganados y grandes comerciantes) a los intereses de Inglaterra, potencia dominante en pleno proceso de revolución industrial. No solo abrió de par en par nuestra aduana a los productos británicos destruyendo nuestras precarias industrias de tejidos, alimentos, muebles, carros, embarcaciones, etc., sino que lo hizo endeudándonos con la banca inglesa en general, y con la Baring Brothers en particular, por un millón de libras esterlinas, y dio como garantía los ingresos fiscales y la tierra pública (la pampa húmeda y hasta las sierras de Famatina en la provincia de La Rioja), y, como demuestra la historia de esa deuda, una parte menor llegó al país para financiar las importaciones, pero se terminó pagando más de veinte veces esa suma hasta saldarla en la presidencia de Manuel Quintana (quien antes y después de ser Presidente fue abogado principal del Banco de Londres en el Río de la Plata).

El subsuelo de la patria sublevado

Raúl Scalabrini Ortiz, memorando el 17 de Octubre de 1945 dijo: “Era el subsuelo de la patria sublevado” y lo fue, porque eran los trabajadores de overol los que entraban por la puerta de nuestra historia diciendo presente, acá están los que con nuestro trabajo generamos las riquezas, ponemos en marcha al país, y a cambio, recibían salarios paupérrimos, con lo que tener un trabajo no garantizaba salir de la pobreza. El mérito indudable de ese peronismo fue darle un lugar en la mesa de discusión de cómo se distribuye lo que se produce, que el país nos pertenece a todos.

Inodoro Pereyra, ese querido personaje del siempre recordado Roberto “Negro” Fontanarrosa afirmaba: “Estoy comprometido con mi tierra, casado con sus problemas y divorciado de sus riquezas”. Y de eso se trata y así lo entendió el peronismo de Perón, de garantizar que primero y antes que nada se perciba un salario digno, que permita vivir decentemente, decimos nosotros, y la OIT (Organización Internacional del Trabajo) define que es así siempre y cuando se preserven “los derechos en el trabajo, las oportunidades de empleo, la protección social y el diálogo social”.

Encuentro de Líderes Mundiales para la Igualdad de Género y Empoderamiento de la Mujer, en la ONU

Muy buenos días a todos y a todas.
Señores Jefes y Jefas de Estado; señor presidente de la República Popular China, Xi Jinping: nuestro reconocimiento y agradecimiento a su país y a su persona, si en cuya decisión y voluntad hubiera sido más que difícil realizar este Encuentro de Mujeres.
En principio, hemos sostenido históricamente que tres son los elementos o los ejes para lograr realmente la igualdad de género. La autonomía económica, la autonomía política y personal y la autonomía social.
Ahora bien, el desarrollo de estos tres ejes solamente puede darse en una sociedad, en un país en donde haya un proceso de inclusión social global con desarrollo y crecimiento económico. Soñar con la igualdad de género en un país inequitativo, en un país con grandes brechas sociales, es simplemente retórica o ilusión.
Por eso en la República Argentina, hemos desarrollado un fuerte proceso de inclusión social que ha traído aparejado también obviamente la mayor oportunidad de igualdad para la mujer; programas y políticas activas como la Asignación Universal por Hijo, la Asignación Universal por Embarazo, la promoción cada vez más intensa por la educación pública y gratuita desde el nivel inicial hasta la universidad, ha permitido paulatinamente junto a leyes de identidad de género de protección de la mujer, un fuerte descenso en la brecha de desigualdad.
Sin embargo, aún en las sociedades más desarrolladas sigue habiendo una desigualdad de género que es el acceso a los sistemas de decisión política de un país.
Por ejemplo, en mi país la matrícula académica universitaria es muy importante la presencia femenina. El día viernes, en un acto antes de venir aquí, en la Facultad de Odontología de la Ciudad de Buenos Aires, la matrícula de mujeres odontólogas de universidad gratuita es del 85 por ciento.
También supera la participación en el Parlamento, lo establecido por las leyes. Una mujer es Presidenta reelecta de mi país, pero sin embargo la discriminación aún permanece, porque por fuera de la discriminación política, económica y social persiste fuertemente en todas las sociedades una discriminación cultural hacia la mujer.
Es más, aún aquellas que ocupamos un alto grado en la primera magistratura del país, muchas veces las críticas que sufrimos no son críticas políticas, sino son críticas sexistas porque aún ocupando las más altas magistraturas, hacen diferencia.
Por ello, creo que además del desarrollo económico la necesidad de tener protección es necesario romper fronteras culturales que han considerado a la mujer durante siglos un ser inferior o menos inteligente que los hombres.
Por eso creo que las políticas también deben estar destinadas a la cultura, a que precisamente empoderar a la mujer, no sea solamente una cuestión de obligación por firmar convenciones o adherir a tratados internacionales, sino que sea la profunda convicción en el corazón de los hombres y aún de las propias mujeres que muchas veces nos discriminamos entre nosotras mismas muy injustamente.
Por eso, señor Presidente, señores y señores presidentas, quiero hacer un firme llamado a los corazones y a las mentes para derrumbar tabúes y prejuicios respecto de nosotras y que las críticas que recibamos sean exactamente del mismo tenor que reciben ustedes los hombres, que no tengan que ver con nuestro sexo, que no tengan que ver con nuestro género. Ese es, finalmente, el gran llamado que queremos hacer.
Hemos alcanzado en Argentina un alto grado de igualdad. Igualdad que debe extenderse también a los jóvenes y a todos los sectores de la sociedad. Porque no solamente encontramos discriminación en las mujeres, la encontramos también en los ancianos, en los pobres, cualquiera sea su sexo.
Por eso, esa debe ser la lucha. Y las mujeres debemos encararla con mayor fuerza, porque es por nuestros hijos y por nuestros nietos.
Y en cuanto, finalmente para terminar, señor Presidente, señor Secretario General, Primer Ministro de Dinamarca: no se sienta mortificado por el error que tuvo al dirigirse al Secretario General de Naciones Unidas, tal vez haya sido una premonición de quién debe ser Secretario General de Naciones Unidas para la próxima temporada y dar muestras aquí en Naciones Unidas, que también la discriminación ha terminado.
Muchas gracias a todos y a todas. (APLAUSOS)

70ª Asamblea General de las Naciones Unidas

Muchas gracias; señor presidente de la Asamblea; señores miembros de esta honorable Asamblea: permítanme, en primer lugar, agradecer un hecho que fue muy relevante y que tuvo lugar, en este mismo ámbito, hace pocos días, para ser más exactos el 10 de septiembre de este año, cuando la Asamblea, por 136 votos positivos, decidió aprobar los principios rectores, los principios básicos para la reestructuración de las deudas externas de los países.

Este ha sido un triunfo muy importante, se han consagrado nueve principios, los tengo aquí anotados para no olvidarme de ninguno de ellos, que son los deben regir el tratamiento y la resolución, cuando se decide renegociar, por parte de un país, su deuda externa:

¿El final del ciclo (que no hubo)?

Frente a las dificultades de los gobiernos posneoliberales en varios países, algunos, con cara de arrepentimiento y voz grave, lamentan lo que sería el final del ciclo de los gobiernos progresistas en América Latina, sumándose, una vez más, a las voces de la derecha. Un ciclo que ellos nunca reconocieron que hubiera existido.

Antes, se decía que nunca había existido ruptura alguna, que los nuevos gobiernos eran la continuidad de los anteriores, tan neoliberales como aquellos. La Venezuela de Hugo Chávez reproduciría la de los gobiernos de Acción Democrática y de Copei.

VII Cumbre de las Américas: palabras de la Presidenta de la Nación

Señor Presidente: en primer término, agradecer al presidente Juan Carlos Varela, la cálida bienvenida de él y de su pueblo, a esta VII Cumbre de las Américas. También saludar a todos los mandatarios y mandatarias presentes, Jefes de Delegaciones.

Bueno, no resulta hablar después de la intervención del presidente de la República de Cuba, amigo y comandante Raúl Castro, pero creo sinceramente que, a partir de esta intervención, sería necesario que en todas las Cumbres, no solamente en la de las Américas, sino en todas las Cumbres, en todos los Foros Internacionales, en las cuales somos tan afectos a incluir como en esta, y estoy muy de acuerdo en hacerlo, las palabras, las ideas y las convicciones de equidad, de prosperidad y de igualdad, nos decidiéramos también a incluir como tema la sinceridad. Porque, sin sinceridad, podemos abordar los problemas, podemos describirlos pero difícilmente podamos llegar a la raíz de por qué surgen esos problemas. Y quiero referirme puntualmente a dos o tres cuestiones, para hacerle honor al ahorro de tiempo que nos ha solicitado gentilmente el presidente de Panamá.