¿Por qué Yanis Varoufakis resulta insoportable para los políticos y para el habitual periodismo económico mercenario europeo?
Diríase que el ejercicio se ha convertido en rito obligado para todo periodista que trabaje sobre asuntos europeos. Después de varias semanas, las columnas de los periódicos se han llenado de artículos cargando contra el ministro helénico de finanzas, Yanis Varoufakis. El último, el publicado por el diario francés de referencia, Le Monde, sobre “el exasperante Monsieur Varoufakis”.
Llamamiento en apoyo de la Grecia que resiste y su Comisión de la Verdad sobre la Deuda Pública
Por el derecho de los pueblos a auditar la deuda pública
A los pueblos de Europa y del mundo,
A todos y todas las que rechazan las políticas de austeridad y no aceptan pagar una deuda pública que nos ahoga, que fue contraída sin nosotros y contra nosotros.
La deuda bilateral Germano Griega
La estructura de la deuda griega es mayormente oficial, con otras entidades públicas europeas, y con vencimientos de largo plazo a intereses bajos. Esta es una transformación de la deuda original que era con acreedores privados pero estos fueron rescatados y su deuda trasladada a los gobiernos. De esta manera, el verdadero problema para Grecia reside en la postura de sus acreedores, ya que éstos consideran que, si bien, la ruptura de las negociaciones profundizaría la crisis griega, los riesgos sistémicos para la zona euro y la Unión Europea serían muy inferiores a lo que habrían sido hace unos años, es decir, que la fase “grave” de la crisis del euro ya ni si quiera es comparable a cuando los bancos sistémicamente importantes -acreedores privados- estuvieron expuestos y con un riesgo latente de un efecto dominó que amenazaba a toda la zona euro. El enfrentamiento es entre el Gobierno Griego y el Gobierno Alemán, detentor de gran parte de la deuda privada rescatada.
Por qué es tan importante entender lo que es el dinero en el caso de Grecia
Mientras Grecia se tambalea bajo el peso de una depresión que ya supera la de los años treinta en Estados Unidos, parece complicado ver una vía de escapatoria de lo que cada vez más parece un plan de “rescate” de los de extensión y ampliación de la deuda por sucesivos reendeudamientos financiados con un esquema Ponzi. De hecho, hay modos mucho más creativos y efectivos de solucionar algunos de los dilemas macrofinancieros a los que Grecia se enfrenta sin que implique la salida del euro. Pero estas soluciones desafían muchos de los paradigmas económicos existentes, incluída la propia concepción del “dinero”.
“Grecia debe independizarse del euro”
El acuerdo firmado por Grecia y la UE después de tres semanas de intensas negociaciones es un compromiso alcanzado bajo coacción económica. Su único mérito para Grecia es que mantuvo al gobierno de Syriza con vida y en condiciones de dar pelea otro día. Ese día no está lejos.
Grecia: romper con las ilusiones
Según una encuesta reciente de la Universidad de Macedonia, el 56% de los griegos cree que la extensión del rescate griego ha sido un éxito, mientras que un 24% considera que ha sido un fracaso. Una encuesta de Metron Analysis recoge que más de dos de cada tres griegos están satisfechos con la forma en que el gobierno esta negociando con sus socios de la UE y el 76% es positivo sobre como se ha desenvuelto en general el gobierno hasta ahora. También señala un apoyo a Syriza del 47,6%, en comparación con un 20,7% para Nueva Democracia.
Grecia: "el gobierno y Syriza sólo tienen una manera de deshacerse del yugo de la Europa neoliberal: una ofensiva con todas las consecuencias"
Una evaluación del Acuerdo de "transición" del 20 de febrero [hasta junio a más tardar, con los plazos de pago de la deuda en julio y agosto] muestra que se trata de una tregua conseguida a iniciativa del gobierno griego y aceptada por la otra parte (las "instituciones", es decir, la UE, el FMI y el BCE). En el próximo período hasta el final del trimestre, se van a crear las condiciones para la negociación del próximo acuerdo.
Han sido ustedes unos irresponsables
Esta semana ha comparecido ante la Comisión de Economía y Asuntos Monetarios del Parlamento Europeo el Presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, para dar cuenta de las negociaciones con Grecia. En mi turno de intervención acusé al Presidente del Eurogrupo de haber jugado a la expulsión de Grecia de la zona euro, con activa participación del BCE, para forzar a Grecia a asumir el actual Memorando. Sólo la excelente negociación llevada a cabo por Varoufakis ha permitido al Gobierno Griego obtener importantes cambios en el programa, contra la voluntad del Eurogrupo, de Alemania y España principalmente, de humillar a Syriza. Dijsselbloem sigue sin reconocer el fracaso absoluto del programa en Grecia. No tiene acostumbrados a ello. Es un socialista holandés caracterizado por su insensibilidad social.— Ernest Urtasun
Con quién está negociando exactamente Varoufakis, y cuál es la estrategia del gobierno de Syriza
Los cuatro meses de extensión del préstamo que se aseguró el viernes de la semana pasada por el ministro griego de finanzas, Yanis Varoufakis, venían con la condición de que Grecia proporcionara una lista de medidas que convencieran a los prestamistas internacionales, particularmente a los bancos alemanes representados por los ministros de finazas en Bruselas, quienes temían que Atenas pudiera eludir los compromisos de recorte del gasto y introducción de medidas de austeridad. El pasado lunes, Atenas envió la lista. Hoy tenemos para discutir todo esto a Michael Hudson. Es un distinguido investigador y profesor de teoría económica en la Universidad de Missouri-Kansas. Su próximo libro se titila: Matar al huésped: cómo los parásitos financieros y la servidumbre por deuda destruyeron la economía global.
Populismo, verdades y mentiras
Nada más conocerse los resultados de las elecciones griegas, dirigentes del PP y del PSOE, con el apoyo de sus respectivos coros de tertulianos, han dicho dos cosas: que el pueblo sabio y soberano de otras ocasiones se ha equivocado y no debe cumplirse su mandato; y que las promesas electorales de Syriza no deben ponerse en práctica. Con semejante declaración de intenciones cómo voy a votar a estos partidos, sería un irresponsable. Ambos reconocen explícitamente que una cosa es prometer y otra cumplir, y que la soberanía popular no pinta nada en comparación con los mandatos que vienen de los poderes financieros.