Mi ADN masculino, las boxeadoras de París y los 19 posteos del Presidente
En 2019, un trasplante de médula ósea me dejó el ADN masculino de mi donante, mi hijo. Eso no me hizo transgénero ni intersex. Dar por hecho que una mujer con elevado nivel de testosterona es trans solo muestra una profunda ignorancia. El presidente Javier Milei aprovechó la polémica por las boxeadoras olímpicas para desplegar su discurso homofóbico y misógino.
Mujeres latinoamericanas: voces en la lucha por la igualdad
En América Latina persisten altísimos niveles de desigualdad de género, de violencia y femicidio, procesos de discriminación y exclusión que tienen como principales destinatarias a las mujeres de todas las edades.
Todos somos macacos
Después de la enésima vez que han tirado plátanos en contra de jugadores de futbol negros en Europa, Daniel Alvez ha resuelto comer el plátano y Neymar declaro: “Todos somos macacos” (Todos somos monos). Es el comienzo de la reacción, que los propios europeos parecen incapaces de hacer, en contra de la discriminación en los estadios de futbol, simple continuación de lo que pasa en la vida cotidiana en países que se consideran blancos y civilizados”.
Europa “civilizada” se ha enriquecido en base a la esclavitud y a su corolario: la discriminación y la reducción de los negros a “bárbaros”.
Javier Diez Canseco Cisneros (1948-2013)
La inoportuna muerte de Javier Diez Canseco Cisneros tras un cáncer fulminante agarra a la izquierda latinoamericana y peruana fuera de base. Diagnosticado a inicios de febrero del 2013 de un cáncer al colon, este resultó un sarcoma agresivo que se hizo metástasis y lo mató en pocas semanas. Dirigente político y analista fino desde fines de los años 60, cuando era estudiante en la Pontifica Universidad Católica del Perú, JDC fue el decano del congreso peruano. Salió electo para la Asamblea Constituyente de 1978 y se quedó en el Congreso de la República tres décadas con dos intermedios, cuando Fujimori cerró el congreso en 1992 y cuando corrió a la presidencia en el año 2006.
Feminismo y cambio social en América Latina y el Caribe
En el contexto del pensamiento antihegemónico, el pensamiento feminista ha producido una teoría crítica que demuestra que los rostros de la dominación son múltiples, y por lo tanto deben ser diversas las formas y los agentes de resistencia a ellos. Sacar a la luz la experiencia de las mujeres, sus aportes y su estar en el mundo, es por sí mismo un proceso constructor y ampliador de la emancipación. La histórica discriminación-opresión-explotación de las mujeres como conjunto subalterno, cruza de manera percibida como natural todas las formas de dominación. Por este motivo, la opresión de género es naturalizada incluso dentro de movimientos y pensamientos emancipatorios.
Histórica resolución por la igualdad
El Consejo de los Derechos Humanos reconoció, por primera vez, la existencia de esa discriminación. Y reclamó a los países que cambien la legislación. Argentina votó a favor: fue copatrocinante de la moción ganadora. Se opusieron africanos y árabes.
Por primera vez en su historia, la Organización de las Naciones Unidas reconoció que existe la discriminación basada en la orientación sexual o la identidad de género. El paso, fundamental para la redefinición de qué se entiende por igualdad, fue la resolución del Consejo de los Derechos Humanos que pidió a los Estados actuar para poner fin a la discriminación al colectivo LGBT y, además, encargó a la comisionada de Derechos Humanos, Navanethem Pillay, que documente la situación a este respecto "en todas las regiones del mundo" y presente el estudio en diciembre de este año. Argentina fue uno de los copatrocinantes de la resolución, que obtuvo 23 votos a favor (entre ellos, los de todos los países americanos presentes en el Consejo) y 19 en contra (países africanos y árabes, que habían reclamado definir previamente qué se entiende por "orientación sexual"), además de tres abstenciones. El texto destaca la necesidad de combatir esa discriminación, dado que "todos los seres humanos han nacido libres e iguales en dignidad y derechos".
Mujeres y mujeres. De la discriminación de mujeres por parte de otras mujeres
Hace unos años se publicó un texto en el que Bidart Campos y Guido Risso compilaron trabajos doctrinarios en distintas ramas del Derecho bajo el título: “Los Derechos Humanos del siglo XXI. La revolución inconclusa”. Con esa última frase de tres palabras, los compiladores acertaron en dos señalamientos ineludibles: a)que el paradigma sobre el que se asentó la lucha por la juridización de los derechos humanos implica un cambio revolucionario frente a toda ideología fundante tanto de criterios de solución economicista, como de políticas discriminatorias por motivo de sexo, clase, credo, o pensamiento; b)que este cambio radical en el eje de sustentación de las políticas públicas no concluye con la sanción de un sistema de normas en tal sentido, sino que, de consuno, éste es un elemento instrumental de cambios concominantes –presentes y a futuro- en las decisiones políticas y en el espacio social. En ambos planos se establecerá la lucha por concretar lo normado constitucionalmente en materia de DDHH frente a un concurso de paradigmas opuestos y a un consenso manipulado sobre el riesgo de desestabilización que el referido cambio de situación impone a intereses y certezas propias de un orden de ideas para las que el nuevo paradigma resulta revulsivo.