Debate entre los embajadores de Israel y Palestina en la Argentina

Juan Pablo Bacino*
Los pedidos de silencio y las interrupciones se repitieron en más de una oportunidad. Desde ambos lados sobraron frases cargadas de ironía y acusaciones. Las posiciones disímiles por el drama que azota a la Franja de Gaza entre Israel y el pueblo palestino se plasmaron en las enérgicas exposiciones del embajador israelí, Daniel Gazit, y el embajador palestino, Farid Suwwan. [size=xx-small][b]Artículos relacionados:[/b] . Gaza: paisaje después de la batalla / Ignacio Álvarez-Ossorio Alvariño* . Crítica de la separación: apuntes acerca de lo Otro y los otros en el conflicto palestino-israelí / Mariela Cuadro . “¡Mentira! ¡Mentira! ¡No tiene perdón!” / Juan Gelman [/size]

Pensar en una convivencia compartida en Israel, con un acuerdo de paz a largo plazo, no parece un objetivo cercano, pero resulta una necesidad impostergable. Así lo entendieron los representantes diplomáticos, cuyas conclusiones circularon por veredas opuestas. "Hay que terminar con aquellos que no quieren la paz, como el grupo Hamas, que declara abiertamente que la única solución es la desaparición del estado de Israel", aseguró Gazit, mientras que Suwwan replicó: "Hasta ahora los gobiernos de Israel no reconocen los derechos internacionales y no quieren un estado palestino (...), hay una cultura de odio. Los colonos queremos otra cultura, de la paz, del diálogo. Es importante crear una nueva generación dispuesta a dialogar y negociar para que podamos vivir en paz".

Las diferentes miradas sobre temas como la raíz del conflicto israelí-palestino, el rol de los organismos internacionales y las exigencias de cada facción para alcanzar un acuerdo de paz, entre otros, fueron disparadoras de fuertes cruces, interupciones y acusaciones.

Los lectores de lanacion.com fueron convocados para participar con sus preguntas durante un videochat en vivo esta mañana. Las inquietudes más representativas fueros elegidas para ser formuladas a los diplomáticos.

- ¿Cuál es la raíz del problema por la cual la histórica disputa entre ambos pueblos se extiende hasta el actual conflicto que sucede hoy a la Franja de Gaza?

Gazit: - Es simple. Son dos pueblos que luchan por el mismo territorio. Todo el resto es historia. Y para no entrar en la historia, la solución es la división, el reconocimiento mutuo de ambos pueblos, cada uno con su derecho a ser un país independiente, de vivir en paz, sin terrorismo, sin guerras y sin amenazas. Los palestinos que persistieron en Israel tras la creación de su Estado en 1947 se quedaron con una parte bastante grande del estado palestino que debían declarar. Decidieron por sus razones, que no sé cuáles son, no declarar su estado palestino, sino continuar con la guerra en contra de Israel y crear la Organización para la Liberación Palestina (OLP).

Nosotros ofrecemos la paz, estamos listos para hacer concesiones, no tenemos ningún interés en dominar al pueblo palestino. Esta lucha continúa porque no podemos alcanzar un acuerdo sobre dónde van a estar las fronteras.

Suwwan: - El embajador de Israel simplifica las cosas sin fundamentos. El conflicto comenzó desde lejos y desde afuera hacia Medio Oriente. En 1897 se creó el Primer Congreso Judío Mundial en Suiza, y allí convencieron a las comunidades judías de todo el mundo de que ellos no quieren vivir con los demás, y que los demás no quieren vivir con ellos en Occidente.

Los judíos de Europa no emigraron a Palestina en forma pacífica como cualquier emigrante, fueron con las armas e hicieron una limpieza étnica del pueblo palestino. Israel tiene que reconocer las barbaridades que cometió y pedir perdón, igual que los alemanes reconocieron y pidieron perdón a los judíos y al mundo. Israel habla una cosa y practica otra.

- ¿Perciben alguna solución a mediano o largo plazo a esta situación, que no implique ni la destrucción de una sociedad ni el desplazamiento de millones de personas hacia otras tierras?

G: - No sé cuándo existió un pueblo palestino independiente, no sé tampoco cuándo Jerusalén fue capital de un estado palestino. Nadie habla de expulsar ni tampoco pretendemos dominar a los palestinos, sólo diferenciamos cómo tenemos que vivir uno con el otro, pero si las escuelas palestinas, que son independientes, enseñan lo que quieren y toda la educación es que Israel no tiene derecho a existir, entonces será muy difícil llegar a un entendimiento a largo plazo.

S: - Israel se queja y protesta reclamando seguridad, a lo cual tiene derecho. Pero la ocupación y la seguridad son dos cosas incompatibles. El final de la ocupación israelí va a marcar el comienzo de la seguridad de ambos estados. El problema es que hablar de la paz y construir más asentamientos para traer judíos de todo el mundo, eso es racismo. Deberían tener conciencia de lo que han sufrido los judíos a lo largo de la historia y no hacer lo mismo con los palestinos.

¿Qué escenario imaginan actualmente si la tregua vencía y no era puesta en marcha la ofensiva israelí?

G: - Israel no ataca a propósito a población civil, como si lo hacen los terroristas palestinos, y no hubiera abierto fuego si no le disparaban misiles. Si Hamas hubiera declarado que no continuaba la tregua, pero al mismo tiempo no hubiese atacado con una lluvia de misiles a las ciudades israelíes, nosotros no hubiéramos hecho nada. Nosotros perseguimos la calma en nuestro país, no pedimos nada más. Queremos una garantía de que no habrá más ataques terroristas desde la Franja de Gaza contra la población civil israelí.

Con la ofensiva militar lanzada en Gaza no buscamos cambiar el gobiernoo ni derrotar a Hamas. Todo eso es asunto interno del pueblo palestino. Y si quieren la paz, deberán deshacerse ellos de los terroristas que no quieren la paz con Israel. En el momento que podamos confiar de que no habrá más ataques, ahí vamos a salir con alegría de la Franja de Gaza y de todos los territorios ocupados.

S: - El gobierno de Olmert negoció con Hamas una tregua que duró seis meses, pero Israel no puede extender el acuerdo porque, tanto [la canciller Tzipi] Livni como [el ministro de Defensa Ehud] Barak precisan vencer al Partido Likud liderado por [Benjamín] Netanyahu en las elecciones presidenciales del próximo mes en ese país. La sangre de los palestinos se convirtió en parte de la campaña electoral.

¿Creen que influyen en las decisiones las manifestaciones a favor y en contra de ambas partes en conflicto?

G: - La guerra hoy en día se desarrolla no sólo en el campo de batalla, sino que muchas cosas se deciden en otros campos, como pueden ser la ONU y la opinión pública, por ello es muy importantes estar atento a estos campos y explicarle a la gente. Por eso este embajador [en alusión a Suwwan] está utilizando calumnias al tildar a los israelíes de "nazis" y "terroristas". Los miembros de Hamas son todos mártires por la causa y piensan que por ello van a ganar la guerra de la propaganda, pero para ello se esconden como cobardes en medio de la población civil palestina.

S: - Respecto a las manifestaciones, no hay pueblos ni gobiernos que se muestren a favor de Israel y de su conducta, y en cambio, lo que sí hay es apoyo de todo el mundo, indignado, acusando a ese país de terrorista. Muchos estados condenaron la agresión del ejército israelí. El mundo está de un lado, e Israel, junto con el apoyo incondicional del gobierno de [George W.] Bush, del otro lado.

¿Qué necesita Israel para dejar vivir a los palestinos en su territorio y qué necesita Palestina para dejar vivir a los israelíes en su territorio?

S: - No es una necesidad, es un deber. Israel asesinó el proceso de paz tres veces. Y ahora, desde el 27 de diciembre asesinaron nuevamente el acuerdo de paz y crearon un enojo y un odio de los niños y mujeres eliminando familias enteras. Se necesita que Israel diga de una vez que quiere aceptar la legalidad de los derechos internacionales, aceptando retirarse del territorio palestino que han ocupado en 1967.

Pero el problema es más profundo: no quieren vivir con nadie. Ellos creen que no debería ser el estado de Israel, quieren ser un Estado judío. Y la religión no puede dominar un estado, dado que el mismo debe ser laico.

G: - El problema es que no reconocen al pueblo judío como pueblo, afirmando que es sólo una religión que no tiene derecho, negándole por sobre todas las cosas el derecho a la construcción de un estado judío, democrático y abierto para todo el mundo.

La propuesta de Israel es la de dividir la tierra. Ya se le ofreció a [Yasser] Arafat la posibilidad de crear un estado palestino, pero la propuesta fue rechazada y se nos echa la culpa a nosotros. Los palestinos han tenido innumerables oportunidades para declarar su estado, pero no lo han podido establecer porque quieren todo. Nosotros le ofrecemos al pueblo palestino un Estado. Al pueblo judío, un Estado. La solución son dos pueblos, dos Estados. Y si no quieren reconocer el derecho del pueblo judío a tener un Estado, estamos en problemas.

*Periodista

Fuente: [color=336600]La Nación - 09.01.2009[/color]

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