Entre lo ideal y lo posible

La reforma de la Secretaría de Inteligencia propuesta por la presidenta Cristina Fernández fue rechazada de forma unánime por la oposición, que la calificó de “un simple cambio de nombres para que todo siga igual”. El autor de este artículo, sin embargo, destaca los avances democráticos sustanciales que implica.

El 26 de enero, la presidenta Cristina Fernández anunció la remisión al Congreso de la Nación de un proyecto de ley orientado a reformar el sistema de inteligencia nacional en aspectos sustantivos.

Marcha, discursos y esa cosa blanda

En El hombre unidimensional, publicado en 1964, el filósofo Herbert Marcuse decía, refiriéndose al discurso de las clases dominantes, de sus representantes políticos y de los medios de comunicación del establishment: “Su universo del discurso está poblado de hipótesis que se autovalidan y que, repetidas incesante y monopólicamente, se tornan en definiciones hipnóticas o dictados”. En otras palabras, Marcuse está hablando de la creación del sentido común, una producción vertical e impuesta por quienes tienen el poder de la reproducción de la palabra. Podría decirse que los sujetos del sentido común no hablan, sino que son hablados por ese discurso.