El sector externo y la salida exportadora
En la coyuntura actual asistimos a la más profunda crisis de la historia argentina, situación que se ve reflejada no sólo en las crónicas diarias, con datos relativos a la sucesión ininterrumpida de algo más de quince trimestres de caída del Producto Interno Bruto, sino también en las circunstancias cotidianas que nos tocan afrontar, relativas, sobre todo, al engrosamiento de la población en o debajo de la línea de pobreza; a la angustia ante la incertidumbre del mantenimiento de la fuente laboral, o a la caída de los ingresos salariales, tanto en términos nominales, cuanto en términos reales.
En el mencionado contexto, suelen emerger, entre tanta falta de presentación de opciones, posiciones que propician que un aumento significativo de las exportaciones contribuiría en grado sumo a la superación de nuestra actual, y ya envejecida, situación económica.
Es por ello que el presente trabajo pretende establecer, en función del análisis de los datos relativos al sector externo de nuestra economía, cuáles son las bondades y cuáles las flaquezas de un programa basado sobre el incremento significativo de nuestras ventas al exterior.