La dulce dignidad

“Lo que hemos hecho en este pueblo es resistir con el derecho humano que tenemos de saber qué ha pasado con nuestros desaparecidos. Yo quiero hacerles una pregunta a los poderosos de esta zona, a los dueños del Ingenio Ledesma que nos contamina el aire que respiramos, los ríos, la tierra. Estamos enfermos. Nuestros pulmones están tapados de carbonilla. Por eso me comprometo a seguir luchando y denunciándolos, porque estos que están matando a la gente tienen que tener un castigo”, dijo Olga Márquez de Arédez en un audio que atesora Liliana Daunes.