Fuera de control: cómo el mundo dejó que el ébola se propagara

Joel Achenbach - Lena H. Sun
Tom Frieden recuerda a la joven de cabellos teñidos de un dorado cobrizo y meticulosamente trenzados, tal vez por alguien que la amaba mucho. La joven yacía boca abajo, con medio cuerpo fuera del colchón. Estaba muerta desde hacía horas, y las moscas ya habían descubierto la carne desnuda de las piernas. Cerca de ella, yacían otros dos cuerpos. Los pacientes postrados que todavía no habían sucumbido ante la enfermedad decían: "Por favor, llévenselos de acá", en referencia a los cadáveres.

La Nación - 16 de octubre de 2014

Noticias relacionadas

Rahmane Idrissa. Es típico de Occidente que se las arregle para hacer suyos los problemas de los demás. En el Sahel...
Johari Gautier Carmona. Pese a sus bajos niveles de contaminación, el continente negro está mucho más comprometido con la...

Compartir en