Bolsonaro pierde sus torres gemelas

Bolsonaro llegó al gobierno con la promesa de mantener y profundizar el modelo neoliberal y de intensificar la lucha contra la corrupción. Con la primera ha ganado el apoyo del gran empresariado y de conglomerados mediáticos. Con la segunda dio el pretexto para quienes, en verdad, lo que querían era un pretexto para impedir que el PT volviera al gobierno.

“En Brasil no hay ningún periódico que tenga una orientación progresista”

Los gobiernos de Lula y Dilma han tenido en contra a los medios de comunicación. En estas elecciones, Marina Silva fue elegida por los medios para evitar la reelección de Dilma. La nueva candidata no tiene equipo ni un programa claro.

Se acercan las elecciones en Brasil y el debate se ubica entre la presidenta y candidata por el PT, Dilma Rousseff, y la candidata por el PSB, Marina Silva. En un escenario electoral complejo, que se vio modificado tras la muerte de Eduardo Campos, está en juego la continuidad de todas las conquistas del PT.

Silva tiene una fachada seductora por ser mujer, zamba, con una militancia histórica, proveniente de los sectores populares, pero la falta de estructura y su impulso por disolver todo lo que construye la convirtieron en la candidata de los medios hegemónicos y de los poderes económicos brasileños. Pablo Gentili describe el panorama electoral y el futuro de nuestro socio fundamental en la región.

La sorpresa más grande

"Los medios de comunicación atraviesan una profunda crisis: global, porque la difusión de las nuevas tecnologías afecta a la prensa tradicional; regional, porque el ascenso de líderes de izquierda en América Latina tensionó la relación con los medios más cercanos al establishment; y en el caso de Argentina, local, por el conflicto entre el gobierno y el Grupo Clarín y la sanción de una ley regulatoria. Pese a ello, los medios de comunicación siguen siendo uno de los actores más valorados por la sociedad y un espacio crucial para la política."José Natanson

A partir de esta coyuntura, compartimos un artículo de Emir Sader publicado en Página/12 sobre el Mundial que SÍ ganó Brasil.

Brasil: el monopolio mediático y su terror económico

La economía brasileña creció el 2,4% el año pasado. En febrero, de nuevo, se batió el record en la generación de empleo en Brasil. Los salarios siguen subiendo por encima de la inflación. La inflación está controlada, por debajo del 6% anual.

Pero dos institutos – Ibope y Datafolha – publican encuestas más o menos iguales: el apoyo al gobierno habría caído entre un 6 y un 7%, según su interpretación, por “pesimismo económico”. ¡En una de ellas se llega al espantoso resultado de que la política de generación de empleo tendría el rechazo del 54% de la población, cuando se está prácticamente con pleno empleo en Brasil!

Los días que conmovieron a Brasil. Las rebeliones de junio-julio de 2013

Una era de rebeliones a escala global
Junio de 2013 entrará en la historia de las rebeliones sociales en Brasil como fecha emblemática. Comenzó el 6 junio en San Pablo, con una marcha de aproximadamente 2.000 personas contra el aumento de tarifas en el transporte público. Los jóvenes del Movimiento Pase Libre (MPL) no podían imaginar que sacudirían al Brasil, con una explosión que sólo ha tenido antecedentes semejantes –al menos en su magnitud, aunque con formas bastante diferentes– en la Campaña por el impeachment (destitución) de Collor en 1992 y en la Campaña por elecciones directas en 1985, aún bajo la dictadura militar.