A contramano de la región

En la semana, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) de la Naciones Unidas, difundió su informe “Estudio Económico de América latina y el Caribe 2015: Desafíos para impulsar el ciclo de inversión con miras a reactivar el crecimiento”, donde dio cuenta de las estimaciones de crecimiento económico para la región durante el presente año.

Desafiando a la economía convencional: un paradigma ético del desarrollo

La ética del desarrollo es un tema que contribuye al estudio del crecimiento, el cual frecuentemente es olvidado en el campo de la economía, inclusive en la línea pluralista de la economía social. La ética del desarrollo en ese contexto argumenta que la sociedades más que la suma de individuos y que la economía lo es también de preferencias individuales. A diferencia del positivismo de la economía convencional, el desarrollo no es visto como crecimiento en un sentido estrecho de expansión material del bienestar, si no como el enriquecimiento cualitativo de los seres humanos en todos los aspectos relevantes de la vida humana.

Indispensable flexibilidad para enfrentar situaciones complejas

La Argentina está avanzado en un acuerdo 2014-2016 con el Banco Mundial, que aún debe ser aprobado por su directorio, habilitando futuros créditos de fomento, sin condicionamientos macroeconómicos, por cerca de U$S 3000 millones, para mejorar el acceso a servicios públicos en las áreas de salud y educación para las poblaciones más pobres, y para promover el desarrollo rural con inversiones en infraestructura.

La estructura económica del (sub)desarrollo y el equilibrio general o ¿qué ocurrió con la teoría del desarrollo?

El desarrollo económico es un tema ausente en la discusión académica y económica general, a partir de que en 1981 el súbito incremento de las tasas de interés en los mercados internacionales de fondos se tradujo en inflación, desequilibrio fiscal, desempleo y contracción del producto bruto para muchos países no desarrollados.

Brasil no se aburre

Los franceses comprendieron hace 45 años que hechos aparentemente anodinos pueden ser el origen de acontecimientos históricos. Un hecho menor, en Nanterre, fue lo que provocó una de las mayores explosiones sociales y políticas de la segunda mitad del siglo pasado: Mayo del ’68. No se trata, obviamente, de explicar la amplitud de esa “deflagración” por su “detonador”, si bien los lazos entre ambos fenómenos son evidentes.