Ahoga a los jubilados
Las recientes resoluciones de la Corte Suprema que impiden la asignación de recursos tributarios coparticipables a la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) ponen seriamente en riesgo muchos de los avances que se lograron en la última década en materia de jubilaciones, asignaciones familiares y políticas públicas en general. Se trata de una medida que no sólo implica una reducción gigantesca de los fondos corrientes de la Anses, sino que además desvaloriza y pone en peligro al principal patrimonio de la misma: el Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS).
El puntapié inicial
La conducción unipersonal de la Corte Suprema de Justicia decidió dar un golpe económico en los últimos días del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, que tendrá pleno impacto en la gestión del próximo a cargo de Mauricio Macri. Ricardo Lorenzetti resolvió desfinanciar el organismo encargado de pagar las jubilaciones, otras prestaciones sociales, la Asignación Universal por Hijo y la tarjeta Argenta, que facilita el crédito de un grupo social vulnerable. El camino para la restauración conservadora que deje atrás los años del populismo de un intervencionismo estatal asfixiante, como lo definió un reciente editorial de La Nación en homenaje al discurso de Alfredo Martínez de Hoz, lo ha inaugurado Lorenzetti.
El legado, la herencia
El kirchnerismo culminó su gestión con una contundente suba del empleo y de los ingresos, junto a una fuerte baja del endeudamiento externo. Paralelamente, deja una coyuntura de restricción externa y déficit fiscal.
Esta economía está dirigida por una política que tiene objetivos, y que está dispuesta a hacer lo que hay que hacer para que esos objetivos se cumplan”, señaló Axel Kicillof poco antes de asumir como ministro de Economía, para luego detallar que estos objetivos serían “defender el trabajo y la mesa de los argentinos”. Fue, en rigor, una síntesis sobre los doce años de gestión económica kirchnerista, donde todas las variables de la economía debieron subordinarse a estos dos grandes objetivos, el empleo y los ingresos (salarios, jubilaciones, planes sociales).