El mundo necesita del petróleo

Lo que hoy llamamos "nuestra civilización" se construyó sobre tres pilares que dieron lugar a la Revolución Industrial del siglo XVIII: el sistema de producción fabril; el triunfo de las ideas de la Ilustración, que ubicaron a la razón y a la ciencia como bases del conocimiento, y las máquinas térmicas. Estos tres pilares de la modernidad se constituyeron en elementos emancipatorios: forjaron sociedades abiertas, permitieron el florecimiento de la creatividad humana y liberaron para la producción todas las potencialidades energéticas de la naturaleza almacenadas en los combustibles fósiles.