La incursión de China en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y sus efectos en el comercio intraindustrial

China se ha convertido en un actor fundamental del comercio mundial. Aunque no ha firmado acuerdos comerciales con los países signatarios del TLCAN, ha ganado terreno como proveedor de bienes logrando grandes avances en esa área. Una de las tendencias dominantes de la integración económica ha sido el desarrollo del comercio intraindustrial, que ha alcanzado altos niveles en los países signatarios del Tratado. En este artículo se analiza el comercio intraindustrial en esta zona de libre comercio, donde la estructura de producción de los países participantes ha cambiado significativamente desde la liberalización del comercio, revelando la internacionalización de las cadenas de producción. Finalmente, se presentan los cambios en la estructura comercial originados por la creciente presencia china en la región del TLCAN, cuyo comercio tiene un esquema similar al de una rueda: los Estados Unidos de América como eje central y el Canadá, China y México como radios.

Medidas no arancelarias en el comercio internacional

Los supuestos impulsores de libre comercio en el mundo, los países industrializados, quienes promueven tratados bilaterales y multipartes de liberalización arancelaria y protección de inversiones en los países en desarrollo, son quienes más protegen su economía a través de medidas no arancelarias. Solo quieren importar materias primas, más no manufacturas.

Estamos pasando de la protección a la precaución, se alegra Pascal Lamy, Director General de la Organización (OMC). Los niveles y la incidencia de los aranceles y las restricciones cuantitativas están disminuyendo en muchos casos significativamente, y en el largo plazo su horizonte es la franquicia total (1), agrega.