El costo argentino

El gobierno busca realizar una rebaja de costos impositivos y laborales para bajar el “costo argentino”. Además, introdujo un andamiaje jurídico más amigablecon el sector privado basado en el RIGI y la Ley Bases. La rebaja de los costos impositivos es compensada con un fuerte ajuste del gasto público, en donde jubilaciones, estatales, Universidades y obra pública son los sectores más afectados. La reducción de los costos laborales es impulsada exclusivamente por una reducción del salario real. El combo de políticas ofertistas compuesto por una mejora de la “competitividad”, un marco jurídico e impositivo marketfriendlyy mayor estabilidad macroeconómica son presentadas como condiciones suficientes para que la economía se recupere. Bajo el eufemismo de bajar el “costo argentino”, presenciamos una transferencia de ingresos desde trabajadores y jubilados hacia los sectores económicos más concentrados. Hasta el momento, esto no se traduce en una recuperación económica, ni parece probable que lo haga en un crecimiento significativo de la inversión

El gobierno hunde la economía

El discurso de asunción a la presidencia de Javier Milei estuvo lejos de contener un análisis económico serio. Sólo fue propaganda para justificar el ajuste -que ya está ejecutando- supuestamente “para evitar la hiperinflación”. Dos días después, su Ministro de Economía Luis Caputo instrumentó una devaluación del 100% que consolida el alza de los precios, así como la transferencia de ingresos hacia el sector financiero y los formadores de precios.

Las off shore son instrumento del delito

 

Un importante número de funcionarios del gobierno nacional, empezando por el propio Presidente de la Nación, han quedado involucrados, de manera directa o indirecta, en las listas de sociedades off shore filtradas en los denominados Panamá y Paradaise Papers. Otro importante número de funcionarios, públicamente hacen gala de mantener sus ahorros en inversiones en el exterior, incluso a través de operaciones realizadas en guaridas fiscales. De manera preocupante, alguno de estos funcionarios ocupa lugares de especial relevancia y responsabilidad en materia económica, monetaria y tributaria del país.