Lo raro en la mira

Modestamente morboso, pero habrá que sumar un interrogante más al omnitransmitido caso de Angeles Rawson: ¿cuántas veces fue pronunciada la fórmula "familia ensamblada"? O para decirlo con los términos que impusieron los últimos días: cuál habrá sido el móvil de periodistas y de todo un elenco de expertos forenses que revolearon los ojos y buscaron un guiño cómplice en la audiencia con esa palabra clave mientras avanzaban sobre conjeturas como, por ejemplo, que la familia ensamblada no advirtió que las llaves y el morral estaban en la casa, no reaccionó a tiempo sobre la ausencia de la niña, no sufre lo suficiente. En la familia ensamblada parece germinar la semilla de la muerte, y si no es la alevosía será la negligencia, pero el desorden que descalabra los lazos sin sangre es caldo de cultivo. Justo ahora, que nuevas leyes la apañan y la multiplican, desde el matrimonio igualitario a la Ley de Fertilización Asistida.