Veinticuatro personas están bajo la lupa de la magistratura de la ciudad meridional de Potenza y trece de ellas han sido arrestadas. Seis se encuentran en la cárcel local, como el hijo del último rey de Italia, y otras siete están en arresto domiciliario.

"Soy inocente, totalmente ajeno a todas estas acusaciones", clamó ante sus abogados el principe Vittorio Emmanuele cuando fueron a visitarlo a la cárcel.

La investigación fue iniciada por el fiscal Henry John Woodcock, un napolitano hijo de inglés, y se ha ampliado en direcciones inesperadas.

En el centro del escándalo está el famoso casino de Campione d'Italia, un enclave municipal italiano en territorio suizo. El heredero Saboya está acusado de ser el líder de una asociación criminal que ofrecía a ricos clientes, sobre todo sicilianos, paquetes turísticos "todo comprendido" para ir a jugar al casino. La oferta comprendía, según la acusación, prostitutas para deleitar a la clientela. Pero se sospecha que el casino de Campione d'Italia servía a las mafias también para reciclar dinero sucio.

Vittorio Emmanuele ha sido acusado además de aprovecharse y hacerse mandar prostitutas para su propio deleite.

Una acusación parecida afecta a Salvatore Sottile, el portavoz del ex canciller Fini que es el principal aliado en la coalición de centroderecha de Silvio Berlusconi.

Las investigaciones, con muchas interceptaciones telefónicas, permitieron descubrir que el ex rey de Bulgaria Simeón II, que fue primer ministro del gobierno de Sofía durante cuatro años (entre 2001 y 2005) realizaba negocios "non sanctos" con su primo, el heredero de casa Saboya al trono de Italia.

Los "affaires" de corrupción comprendían licitaciones en los hospitales búlgaros y los capitales que circulaban en torno a las actividades de telecomunicaciones en Bulgaria.

El hijo de Vittorio Emmanuele, el príncipe Emmanuele Filiberto, famoso también por las campañas publicitarias de zapatos, bebidas y anteojos de Italia, está acusado de actos de piratería informática. Con dos cómplices habría entrado en un sitio de Internet hostil a la familia Saboya, "bombardeándolo" con programas especiales y virus, hasta oscurecerlo.