"Reflexiones y observaciones sobre la violencia cotidiana y sus causas "

Emilio José Gómez Ciriano

1. A modo de Preámbulo.
2. Agresividad Y Violencia.
3. Lo que nos amenaza...y lo que hay detrás.
4. Los mecanismos que caracterizan la violencia cotidiana y los instrumentos que ayudan a generarla.
4.1. Los mecanismos que se encuentran en la raíz de la violencia cotidiana.
4.2. Los instrumentos para generarla.
5. Algunas pautas para atajar la violencia cotidiana.

Bibliografía.

1. a Modo de preámbulo
Que la existencia de violencia y las manifestaciones de la misma han sido una constante a lo largo de la historia de la Humanidad es una afirmación difícilmente discutible .Los libros de Historia son reflejo fiel de abundantes guerras, de colonizaciones no precisamente pacíficas, de numerosos exilios y persecuciones . En todos estos acontecimientos aparecen fácilmente identificados los actores y promotores de las mismas (reyes y emperadores, conquistadores, papas, obispos, señores feudales, ) muchas veces considerados como héroes locales o nacionales en sus propios países, También aparecen identificadas las víctimas (herejes, judíos, indios, negros, comunistas, obreros, mujeres, homosexuales ) así como plenamente justificados los motivos por que se llevaban a cabo estas actuaciones (motivos de carácter religioso, político, étnico, económico, de "necesidad de espacio vital" y legitimados los instrumentos empleados para ello (guerras, persecuciónes., torturas, excomuniones, destierros ..etc).

El desarrollo universal de una cultura de respeto a los Derechos Humanos a partir de principios del siglo XIX, la creación de organismos supranacionales encargados de la salvaguarda de la persona y sus derechos y la constatación de los horrores ,consecuencia sobre todo de las dos últimas Guerras Mundiales creó una mayor sensación de pudor a la hora de justificar públicamente actuaciones de contenido violento . Así, sin haber desaparecido las motivaciones últimas que inspiraban dichas actuaciones ,-que se han mantenido secularmente - Asistimos en los albores del siglo XXI a un sutil proceso de maquillaje de motivaciones para transformarlas en otras más " correctas políticamente" y " asumibles socialmente " de modo que puedan justificar futuras actuaciones . Las últimas guerras instigadas desde los países del "primer mundo" , llevan en su justificación el restablecimiento de la democracia, la evitación de la proliferación de armas de destrucción masiva, la protección de tal o cual minoría oprimida…etc.

En el ámbito económico sucede algo muy parecido. los despidos sin causa, las expropiaciones de terrenos, la flexibilización de los horarios de trabajo, el recorte de los servicios sociales, la liberalización de los suelos…etc, se justifican desde una llamada a la mayor competitividad en el mercado, desde un teórico aumento de las posibilidades de elegir de la población. Beneficios , todos ellos, que a la larga redundarán -según se repite machaconamente- en un mejor y mayor nivel de vida para todos los habitantes de la sociedad , (que en la práctica nunca se consigue).En el ámbito medioambiental las amenazas que para el mismo suponen los residuos tóxicos, las emisiones de CO2, los cultivos con semillas transgénicas, la apuesta por los monocultivos intensivos, son justificados desde un abaratamiento de los precios, una mejora para la exportación, un pago de la deuda externa...etc

Maquillar , pues , motivaciones por las cuales se ejercen acciones generadoras de violencia es una de las principales características del modelo neoliberal vigente. No es, sin embargo éste, el único elemento que premeditadamente es ocultado. Los responsables últimos de mecanismos generadores de violencia a nivel mundial resultan difíciles de identificar, pues a menudo se esconden tras una nebulosa de siglas o denominaciones (Trilateral, Club de Paris, AMI, FMI …etc) . Por otro lado, los cauces o instrumentos que se ponen al servicio de los actores y transmiten sus motivaciones son mucho más sutiles y tecnificados que en otros tiempos y , lo que es más grave, las víctimas en este modelo son mucho más numerosas, aunque muchas de ellas, al contrario que en épocas anteriores, ni siquiera saben que lo son

Este contexto de violencia, tan difuso como tremendamente presente y eficaz, que estructura el sistema neoliberal y que acertadamente es conocido como "violencia estructural" por numerosos científicos sociales , es esencial para generar el caldo de cultivo de una violencia cotidiana de la que se nutre y a la cual va alimentando. Reconocer los mecanismos de violencia estructural que puedan hallarse en el germen de la violencia cotidiana será el primer objetivo del presente trabajo. Descubrir qué mecanismos caracterizan la violencia cotidiana será el segundo, y proponer iniciativas que traten de atajar esta violencia cotidiana será el tercer elemento que abordaremos a lo largo de este artículo

rimeramente, sin embargo, será necesario delimitar bien el concepto de "violencia" y distinguirlo de otros conceptos relacionados como puede ser el de "agresividad".

2. Agresividad y violencia:
Afirman los expertos que los conceptos de violencia y agresividad no son conceptos equivalentes. Pues la violencia es sólo el resultado de una forma de encauzar la agresividad. Dicen además que la agresividad no es mala, sino que es necesaria . Todos los seres "animales" la tenemos y forma parte de nuestro instinto de supervivencia.

La violencia contra el otro-y paradójicamente también contra uno mismo- sería ,en este contexto, la consecuencia extrema de la agresividad, que se manifestaría cuando la persona percibe un peligro cierto para su integridad y tiene que reaccionar para sobrevivir. Tendría, por tanto, la violencia, en el ser humano, la potencialidad de ser un recurso excepcional , cosa que no sucede en el caso de los animales. Cuestión distinta será que en determinados contextos, el recurso explícito a la violencia esté tan asumido e interiorizado por los seres humanos que la excepcionalidad se convierta en regla habitual (lo que sucede en Colombia con el fenómeno conocido explícitamente como "la violencia"o con la "intifada" y su represión en el conflicto israelo-palestino). Sin embargo esto no tiene porqué ser generalizable. Por poner un ejemplo: en España, tras los sucesos del 11-M no hubo manifestaciones de violencia hacia la población magrebí sino que la capital de España fue un claro ejemplo de civismo en contra de los pronósticos más alarmistas- Otro ejemplo: El ejercicio del voto en las urnas el 14 de marzo de 2004 fue, además de una manera ejemplar de ejercer un derecho constitucional legítimo, un modo de encauzar adecuadamente un sentimiento de agresividad en un momento político muy delicado.

En consecuencia. si toda manifestación de violencia es siempre resultado de un sentimiento de agresividad (lo cual no quiere decir, como hemos visto que toda agresividad tenga necesariamente que encauzarse desde la violencia) y ese sentimiento de agresividad se produce, a su vez, cuando existe una sensación de peligro que amenaza a la integridad de instituciones, sociedades y/o individuos, es lícito preguntarse por los motivos por los que se sienten amenazados, inquietados, temerosos los individuos que componen una sociedad como, en nuestro caso, la española. Dicho de otra manera ¿por qué se sienten amenazados los ciudadanos españoles? ¿qué es lo que les inquieta?

3. Lo que nos amenaza...y lo que hay detrás
Una clarificadora respuesta nos la proporciona el CIS a través de sus " barómetros" que arrojan como resultado que los españoles se sienten amenazados por quedar en el paro , por no poder acceder a una vivienda o no poder pagarla, por no llegar a fin de mes, por no llegar a tener una pensión digna en su vejez, por las condiciones y la inestabilidad en el empleo que desarrollan., por no gozar de seguridad . El miedo a "no servir", "no contar", quedar fuera del circuito "normalizado" "a no ser competitivo" se encuentra muy generalizado entre la población española. Este miedo es , en el fondo, un miedo a no poder llegar a realizar o culminar el proyecto de vida , aspiración común, en sus diferentes variantes, a todo ser humano.

La aspiración a construir el proyecto de vida tiene en la otra cara de la moneda el miedo a todo aquello que de alguna manera lo pueda incomodar o amenazar, y en la actualidad las nuevas generaciones de españoles perciben que lo tienen francamente difícil, porque su estabilidad en el empleo está más amenazada de lo que lo estaba en tiempos de sus padres, porque el acceso a la vivienda y el pago de la misma es más difícil y gravoso, y porque la prejubilación a los 55 años o el despido a partir de los 40 es un lugar común entre sus temores. Todo esto dentro de un ritmo de vida, frenético que el mismo sistema económico impone, sin espacios para el cuestionamiento y el diálogo, con unos modelos de referencia profundamente individualistas que destruyen lo comunitario, con unas imágenes y mensajes intencionadamente maniqueistas y repetitivas que se transmiten en los medios de comunicación y que promueven que el individuo que vive inmerso en ese ritmo de vida, se mida y frustre permanentemente con el "ideal" inalcanzable de persona que los medios le proponen, empeñando en su afán de alcanzarlo múltiples esfuerzos - a pesar de todo y de todos- y reproduciendo de esta manera los mismos mensajes que recibe, con lo que así justifica y legitima su comportamiento ante los otros y ante la sociedad, y contribuye a extender un "pensamiento común, único" en el que todo disenso es entendido como amenaza y toda persona que disiente como rival

En este contexto de tensiones y frustraciones, de expectativas y temores es donde se siembra el terreno para que actitudes como el mobbing, o el bullying, la violencia doméstica y de género o las reacciones xenófobas de todo tipo encuentren su acomodo. Pero también otro tipo de reacciones más toleradas , más " a pie de calle" como la violencia en torno a acontecimientos deportivos , la que se genera en torno a la conducción de vehículos, la proliferación de pandillas juveniles...etc. la cual, si no se ataja a tiempo en sus causas más profundas terminará llegando a mayores. Por ello es esencial conocer cuáles son los mecanismos e instrumentos que alimentan y propician esta violencia cotidiana.

4. Los mecanismos que caracterizan la violencia cotidiana y los instrumentos que ayudan a generarla
4.1. Los mecanismos que se encuentran en la raíz de la violencia cotidiana
Existen, de acuerdo con J. Alemany , además de un mecanismo económico (ya visto) , otros de carácter biológico psicológico y cultural que caracterizan la violencia cotidiana en el marco del sistema neoliberal actual

A) El llamado mecanismo biológico , consiste en la deshumanización , que cataloga al "otro" como un "no ser humano". El objetivo es que "El otro", como persona integral deje de ser importante para mí como ya lo es para el sistema económico . Y es que ,parodiando a Primo Levy "un ser deshumanizado y un sistema inhumano difunden y extienden su inhumanidad en todas direcciones y especialmente hacia abajo" (cfr. Primo Levy: los hundidos y los salvados). De esta manera se construye un individuo des-actualizado, des-relacionado. Des-referenciado

Martín Buber escribía en su célebre "yo-tu" que los seres verdaderos son vividos en la actualidad, mientras los objetos lo son en el pasado, la "actualidad" implica siempre relación y esa es la manera de encontrarse. La deshumanización implica por el contrario des-actualización con el otro "mi próximo" y por tanto su "objetualización". Una vez que he objetualizado al otro, que lo he deshumanizado, se abre la veda para la violencia

B) Un mecanismo psicológico referido a la incapacidad para para procesar adecuadamente la capacidad de amar y valer , bien por exceso, bien por defecto. Tanto en un caso como en otro caso se genera violencia. Los referentes de persona triunfadora que presenta el modelo actual , favorecen un individualismo hobbesiano, y una competitividad feroz que acaba destruyendo redes afectivas, generando frustración y ansiedad permanentes y convirtiendo a los vecinos en desconocidos, y a compañeros de trabajo en contrincantes.

c) Un mecanismo cultural que da coherencia a lo anterior a través de la universalización de unos nuevos modelos y pautas pseudoculturales basadas en la inmediatez de lo inmediato y en la superficialidad de las relaciones, que enlaza además con los afectos y desafectos de carácter psicológico y que convierte a la persona en un puro cóctel de sensaciones. Todo ello con el fin de que el individuo construya sus creencias y opciones vitales desde la identificación de felicidad con un consumo de bienes y estimulos, de manera que cuando esta realidad no se consigue la persona se frustra y su agresividad se transforma en violencia.

4.2. Los instrumentos para generarla
Tres son los instrumentos que manejados habilmante contribuyen a activar los anteriores mecanismos:
A) El manejo del miedo : ". El miedo perfectamente orquestado y plenamente justificador de conductas violentas, que nos hace "ciegos" y "ciegas" hacia los otros

José Saramago en "ensayo sobre la ceguera" refleja los efectos del miedo en el siguiente episodio:
" La ofuscación producida por la intensa luz del exterior y la transición brusca a la penumbra del zaguán les impidió, en el primer momento, ver al grupo de ciegos. Los vieron luego inmediatamente. Soltando gritos de terror tiraron las cajas al suelo y salieron como locos por la puerta afuera. Los dos soldados de escolta, que estaban en el descansillo, reaccionaron ejemplarmente. Dominando, solo Dios lo sabe, el miedo legítimo que sentían, avanzaron hasta el umbral de la puerta y vaciaron sus cargadores." Empezaron los ciegoa a caer unos sobre otros , y al caer seguían recibiendo balas que ya eran un puro despilfarro de munición".

Pocas sensaciones paralizan tanto como el miedo. Miedo a perder el trabajo, miedo a no gozar de jubilación , miedo a una enfermedad, miedo al fracaso, miedo a perder la identidad, las raíces, la religión, a no ser aceptado, valorado, a quedar fuera del circuito. Los nuevos señores del mundo conocen bien estos temores como ya los conocían los antiguos , y al tiempo que desmontan y reducen espacios de apoyo, estabilidad, relación y futuro para los ciudadanos utilizan y manipulan sus miedos para hacerles competir por las migajas sobrantes de futuro. El miedo deshumaniza, des-referencia, impide actualizar la relación con el otro (como ya hemos visto) objetualizándole . Eso explica que respiremos cuando no nos ha tocado la medida de deslocalización o cierre de la empresa…aunque le haya tocado a nuestro vecino…El miedo nos hace delatores de otros, nos hace reservados a la hora de compartir información, nos hace cerrados y desconfiados del "nuevo" que llega a la empresa,del inmigrante que llega al barrio y quiere rezar en su mezquita…

El miedo no va solo en este trayecto: tiene dos grandes aliados: una nueva cultura del tiempo y una nueva cultura de las apariencias

B) El manejo del tiempo: Una nueva cultura del tiempo
La nueva cultura del tiempo se basa en el concepto "eficiencia". Una eficiencia laboral y económica que significa tanto como la búsqueda del mayor rendimiento posible al menor coste posible…Frente a este ideal, los derechos, y demás salvaguardas existentes en las legislaciones son percibidas como amenazas. En este marco, tampoco el tiempo se regatea. La dedicación en tiempos extra-laborales a realizar cometidos laborales es considerada prueba de la adscripción a la filosofía de la empresa y fidelidad a la misma mientras por el contrario, la no dedicación de estos tiempos es inequívocamente percibida como falta de compromiso con la consiguiente culpabilización del presunto indolente. Poco importará que tras el trabajo quede poco tiempo para cultivar encuentros o relaciones sociales o familiares. El miedo a perder las pocas seguridades que el momento actual ofrece, legitima sobradamente todo tiempo entregado a las ocupaciones laborales. Tiempo, además que es vivido no lo olvidemos- desde la competitividad y la desconfianza en el otro. Tiempo que es vivido - en resumidas cuentas- desde el individualismo.

No es extraño pues, que una persona que vive encadenada a ese ritmo la mayor parte del día termine exportando el "criterio" de eficiencia a los ámbitos de las relaciones sociales, barriales, vecinales y familiares en que se mueve , si es que le queda tiempo para ello. La aplicación de criterios de eficiencia a la comunicación familiar,vecinal o social, carga de superficialidad a las mismas y termina asfixiándolas. Así La casa acaba convertida en una proyección del trabajo en lo que a la calidad de las relaciones se refiere, y los vecinos y familiares en una proyección de los compañeros de trabajo con lo que ello conlleva de desconfianza , rivalidad e individualismo. El tiempo como ritmo de vida ha pasado a convertirse en el tiempo como "cronos"· y las relaciones personales han pasado a ser objetivizadas…el otro ya no es con quien me encuentro sino con quien me enfrento.

c) El manejo de la imagen:
odo lo anteriormente dicho recibe adecuada cobertura desde el tratamiento de una imagen propia del tiempo presente que va a desplegar los estereotipos personales y sociales acordes con los valores de individualismo, competitividad , y eficiencia, en boga y a definir los límites y caminos hacia el triunfo y el fracaso. Esta imagen se transmitirá desde unos medios de comunicación social que, siguiendo a Alemany reunirán cuatro elementos motores de gran importancia: un flujo informativo concentrado en pocas manos, un cambio en la estructura de la información, un predominio de la imagen sobre la palabra y una sobreinformación (definida como la censura de los tiempos actuales) , lo cual provocará al menos tres efectos: Primero: que se puedan crear realidades ad-hoc ( a conveniencia) Segundo: que se acabe consolidando el binomio ver igual a comprender, lo cual es perfectamente coherente con la vivencia de tiempo que hemos planteado en el párrafo anterior, en el cual el espectador no tendrá tiempo para procesar imágenes ni situarlas ni comprenderlas, ni mucho menos comentarlas o cuestionarlas con otros. Sólo para consumirlas .Tercero: que la sobreinformación produzca la pérdida de la memoria histórica de la población y no se sea capaz de situar la noticia en el contexto histórico preciso. Estos tres efectos vulnerabilizan al espectador y permiten su manipulación.

5. Algunas pautas para atajar la violencia cotidiana
Atajar los efectos de la violencia cotidiana mediante la represión de los que la ejercen es tan fácil como poco efectivo, puesto que los mecanismos de creación y reproducción de la misma no se ven alterados y resurgen como la hidra. Es imprescindible por tanto, para entrar a combatir la violencia adecuadamente empezar incidiendo en las causas que la generan. Causas que tienen que ver con el desequilibrio existente en el reparto de la Riqueza entre el Norte y el Sur, con el modelo de producción y consumo existente, con el papel que juegan los bloques económicos y las compañías transnacionales en el comercio y la inversión mundiales , con el concepto que se tiene del "factor trabajo" y la inmigración, con las posibilidades de maniobrabilidad con que cuenten los estados a la hora de legislar sin presiones para el bien de sus sociedades ,con el mayor o menor protagonismo de los organismos internacionales , con la existencia , efectividad y aplicabilidad de una legislación internacional que regule el comercio, los movimientos migratorios, la protección medioambiental, los derechos humanos...etc. La primera pauta, por tanto, será desvelar los mecanismos de injusticia estructural generadores de violencias presentes o futuras , para lo cual habrá que realizar el esfuerzo de informarse . Numerosos informes de organismos internacionales y organizaciones no gubernamentales facilitan esta labor (informes del PNUD,FAO, OIT, AI…etc)

Con lo anterior no es suficiente. Es preciso también cuestionar los modelos de persona, de sociedad, de producción y de éxito que ofrece el sistema neoliberal vigente por ser nocivos para la creación de proyectos de vida de la ciudadanía por destruir tejido social , redes de solidaridad y por generar desconfianza y egoísmo en los ámbitos de relación, motivos todos ellos que abren la puerta a la violencia.

Este cuestionamiento se debe realizar desde la apuesta por una vivencia del tiempo distinta y de calidad, a partir de una revitalización del comunitarismo y una recreación de espacios de encuentro que posibiliten actualizar la relación con el otro (Buber) que permitan reconocerle y no objetualizarle , que ayuden a relativizar los miedos dominantes y afrontar con creatividad, seguridad y audacia las dificultades que aparezcan en el camino. Todo lo anterior aderezado con un enfoque crítico de los mensajes que propagan los medios de comunicación, con una denuncia de aquellos que son alienantes y despersonalizadores y con una búsqueda responsable y contrastada de la verdad desde fuentes alternativas.

Los anteriores cuestionamientos son plenamente compatibles con la apuesta con que desde instancias de poder se genere una conciencia en materia de educación para la paz. Las presencia de esta materia como parte de los contenidos transversales del curriculum en la LOCE y la LOGSE es una buena prueba de que esto es posible
Finalmente, será necesario tener la suficiente sabiduría y conocimiento para afrontar y reconducir adecuadamente aquellas manifestaciones de violencia que ya se han producido o que están en una fase incipiente. En este sentido las investigaciones y trabajos que se han ido produciendo en el ámbito de la educación para la paz pueden dar buena cuenta de ello

En Conclusión : La creación y consolidación de condiciones de convivencia saludable entre los miembros de una sociedad es condición necesaria para su sanidad y sostenibilidad Ello exige necesariamente la erradicación de toda violencia. y muy especialmente de aquella que por cotidiana es más generalmente asumida por la sociedad, de aquella violencia "de baja intensidad" que hunde sus raíces más profundas en una violencia "de carácter estructural" asentada en el desequilibrio Norte-Sur. Desvelar los mecanismos generadores de violencia estructural, denunciar un sistema que para lograr sus objetivos apuesta por la destrucción de la persona y el desmantelamiento de redes de solidaridad y tejido comunitario no es sólo una mera cuestión de opción progresista de militancia, ni tampoco un deber ético. Es ya una cuestión de supervivencia .

Bibliografía
ALEMANY , J.M (2003) " El examen de los mecanismos que justifican la violencia desde la reflexión sobre los conflictos existentes " en "Los nuevos escenarios de la violencia". Cuadernos del Instituto Social León XIII nº2
BUBER, M : (1923) Yo y tú . Ediciones Nueva Visión, México.Edic.1994
LEVY, P (1989) los hundidos y los salvados . Muchnick editores, Trad. Pilar Gómez Bedate Barcelona. Edic.Bolsillo 2ª edic.2005
SARAMAGO,J (2003) Ensayo sobre la ceguera. Madrid, Alfaguara

Fuente: El Boletín Informativo de Trabajo Social (Bits) es una Revista Digital, de la Escuela Universitaria de Trabajo Social de Cuenca

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