¿Detroit pone en jaque a Alemania?

Las bancarrotas municipales en Estados Unidos tienen tras de sí la experiencia traumática de la crisis fiscal de Nueva York en la década de los setenta. Liderada por Walter Wriston al frente de Citibank, la «Gran Banca» gestionó la quiebra de la Gran Manzana y demostró que los intereses de las instituciones financieras priman sobre el bienestar de los ciudadanos.[1]

La capital del auto entró en bancarrota

Detroit, la ciudad de los motores, entró en bancarrota. La ciudad del medioeste estadounidense, famosa por albergar a la industria automotriz, se presentó el jueves pasado en concurso de acreedores en un juzgado federal del estado de Michigan. Símbolo de la industria automotriz en Estados Unidos, Detroit llega ahora quebrada a su 312º cumpleaños, con población disminuida y deudas por 18.500 millones de dólares.

La bancarrota de la capital de los fierros y el rock en EE. UU.

DETROIT CON BANDERA DE REMATE. A pesar de que una jueza de Michigan rechazó el pedido de quiebra de la emblemática ciudad -cuna de la industria automotríz-, ésta parece inevitable.

La declaración de bancarrota de la ciudad de Detroit, la más importante del Estado de Michigan, no sorprendió a casi nadie porque su debacle prenunciaba ese final. Con una deuda de 18.500 millones de dólares que reclaman unos 100 mil acreedores y casi sin recursos fiscales a los que echar mano, tras una década de endeudamiento creciente, el símbolo del desarrollo industrial de Estados Unidos se ha convertido en una metrópolis sin alma ni dinero.

La bancarrota de Detroit y el futuro de EE UU: robots, raza, globalización y el 1%

La gran pregunta es si la quiebra de Detroit y su probable declive es una casualidad o si nos dice algo acerca de la distopía en la que Estados Unidos se está convirtiendo. Me parece que los problemas de la ciudad son las dificultades del país en su conjunto, especialmente las cuestiones de la desindustrialización, robotización, el desempleo estructural, el aumento de las comunidades cerradas y exclusivas de los ricos (el 1%), y la división racial. El alcalde ha pedido a las familias que viven al oeste, la parte mas despoblada de la ciudad de venir hacia el centro, para que puedan ser atendidos. Me pareció post-apocalíptico. A veces, los barrios abandonados accidentalmente se incendian, y 30 edificios son convertidos en humo.